Mirando las estrellas se encuentran 2 soñadores, lagrimeando cada momento su desdicha buscan limpiar, fantasean que el descontento en algún instante los abandoné y a pesar de no conocerse, suplican a aquel lucero un deseo similar.
Que no los vuelvan a engañar.
Y hay se quedan estos soñadores, inmóviles, invernantes casi sin respirar, mientras millones de imágenes pasan por su mente, por sus ojos, por su alma y por su piel fría e invernal, tiritando de desconsuelo, desterrada del calor sentimental.
Estos son 2 soñadores que olvidados por el amor, deciden seguir adelante
mas siendo incapaces de olvidar, siendo esclavos del recordar.
Mirada fragmentada por el un rocío constante, esperanzas busca reedificar
Y un golpeado corazón que se levanta a regañadientes,
cansado de siempre terminar igual.
Y estos 2 soñadores, victimas y culpables de sus dolores, atormentadores, torturadores, castigadores del iluso que busca amar, porque aun no aprenden a diferenciar entre lo que se quiere y lo que se necesita, entre lo fariseo y lo veraz.
Amigos de la soldad que al unísono manifiestan su tristeza, sin saber que el hado ha decidido la sentencia, la congoja ha de culminar.
Cuando estos soñadores se lleguen a encontrar.
he vuelto después de un periodo de meditación creativa, esta es mi nueva propuesta "para llegar a ti" el presente poema es la introducción de una simpática historia que comenzare a relatar.
ResponderEliminarmiércoles 4 de mayo: "Para llegar a ti, la ilusión de el".
saludos
Bienvenido de nuevo....el prólogo promete. Esperaremos la historia. Un saludo.
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